El Municipio que quería vivir

Nuevo esquema tributario en Azul

 

En el partido de Azul se llevó adelante, el martes 5 de diciembre, la asamblea de concejales y mayores contribuyentes que convalidó la ordenanza fiscal e impositiva que amplía la base imponible de la tasa de servicios esenciales, y abarcará los inmuebles rurales, que estaban exentos. La tasa, que se llamaba servicios generales, estaba dirigida únicamente a los inmuebles urbanos. El Cohete a la Luna dialogó con el intendente electo, Nélson Sombra, y con la concejal de Unión por la Patria y presidenta del Concejo Deliberante de Azul, Inés Laurini.

“Nosotros lo que hacemos es ampliar la base de contribuyentes, con una ecuación muy simple: mientras más somos los que pagamos, menos pagamos cada uno”, explicó Laurini. “Lo que hicimos fue sumar al inmueble rural, que son 650.000 hectáreas de campo, porque los únicos que estaban pagando para sostener los servicios del distrito eran las 20.000 hectáreas que comprenden el casco urbano”, graficó el intendente. Representantes de las patronales del agro manifestaron su rechazo en el veredón municipal.

 

Ampliación de la tasa por servicios esenciales.

 

La asamblea de mayores contribuyentes concluyó con un resultado de 17 votos afirmativos y 16 votos negativos. “Básicamente, lo que planteamos es una ampliación, a lo que acá se denominó servicios generales —que incluyen salud, educación, deporte, inclusión de la discapacidad, cultura, esparcimiento, transporte, señalética de calles, mantenimiento y conservación de plazas, paseos y parques infantiles— únicamente contribuían los inmuebles urbanos”, manifestó Laurini. Y agregó: “En un distrito con las características del nuestro, el quinto en superficie de la provincia de Buenos Aires, nosotros entendemos que los propietarios de los inmuebles rurales también tienen que contribuir de alguna manera con la prestación de estos servicios que nosotros denominamos esenciales”.

Consultada por la crítica y el rechazo que produjo la ampliación de la tasa sobre los inmuebles rurales, generando la protesta de las patronales del agro, la presidenta del Concejo Deliberante de Azul explicó: “Ellos critican la cuestión de que le hayamos asignado el valor vinculado a litros de gasoil. Plantean la inconstitucionalidad de la tasa. Nosotros hicimos la consulta a la Asesoría General de Gobierno y no tendría vicios de inconstitucionalidad”. En el veredón municipal, un grupo de representantes de la Sociedad Rural de Azul, Centro Empresario, Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) y la Federación Agraria Argentina se manifestaron y depositaron cráneos de vacas en las escalinatas, incendiaron cubiertas y hasta un peludo.

 

 Una tasa que era solamente urbana y que ahora abarca al inmueble rural encendió el rechazo del sector.

 

Cráneos de vacas y un peludo al fuego, la forma de protesta de las patronales del agro. Fotografías del medio Noticias de Azul.

 

Días previos a la sesión, corría el rumor en Azul de que estaría presente el presidente de la Sociedad Rural Argentina a nivel nacional, Nicolás Pino. Pero prefirió poner el cuerpo en un canal de televisión en Buenos Aires, que le quedaba más cerca. Desde allí, Pino dijo que “se estaba generando una nueva tasa de impuestos”. Pero en realidad no había nada nuevo, más que un cambio de nombre de una misma tasa que ya pagaban los sectores urbanos y que con total justicia se amplió para que ahora tributen también los inmuebles rurales. Pino argumentó su postura expresando que la ciudadanía votó un cambio de rumbo, que para él supone que tribute poco y nada el sector que representa. Adhirió al infaltable rezo mediático que en su vuelo televisivo practica Antonio Laje, “mileineando” con que la solución está en “bajar gastos de la política”.

La verdad se encontraba muy lejos de donde estaba Pino. Y se trataba de que, para garantizar la prestación de servicios esenciales del partido bonaerense de Azul, no se creó ningún tributo nuevo, sino que la tasa existente (que cambió de nombre) amplió la base de contribuyentes, distribuyendo de manera equitativa y progresiva el peso de la carga tributaria, aspirando a mejorar el índice de cobrabilidad. Los inmuebles urbanos de la localidad de Azul contribuirán con un valor equivalente al de dos litros de gasoil, mientras que los inmuebles urbanos de las localidades de Cacharí, Chillar y 16 de Julio lo harán con el valor equivalente a un litro. Para los inmuebles rurales se realizó una segmentación según la capacidad productiva, y a partir de la escucha y las observaciones realizadas por los representantes del sector se determinó: zona norte, medio litro por hectárea; zona centro, tres cuartos de litro por hectárea, y zona sur, un litro.

Además, se establecieron topes: los valores no podrán tener incrementos superiores al 30 % en el segundo trimestre, 60 % en el tercer trimestre y 90 % en el cuarto. Aquellos productores ganaderos afectados por la sequía podrán acceder al régimen de exenciones.

Inés Laurini afirmó que representantes de las patronales del agro “hicieron algo deshonesto, que es intentar denominar a esto impuestazo y decir que afectaba a todos”, cuando era todo lo contrario, porque según manifestó: “Nosotros en el intento de equilibrar lo que paga un inmueble urbano, que siempre tuvo la tasa más alta del centro de la provincia de Buenos Aires, pusimos un aumento de la tasa urbana muy por debajo de la inflación y escalonado, para que con el aporte de los inmuebles rurales no desfinanciáramos al municipio e ir paulatinamente generando un equilibrio vinculado a la capacidad contributiva de los propietarios de los inmuebles”.

 

Inés Laurini, presidenta del concejo Deliberante de Azul.

 

La concejala de Unión por la Patria explicó la particularidad del distrito “donde la principal tasa es la urbana". Y agregó: “Uno puede ver en todos los distritos de alrededor,  la principal tasa en la vial-rural, salvo en Tandil y Olavarría que, como tienen otro tipo de actividades, tienen otras tasas principales. En Tandil la pagan el comercio y la industria. En Olavarría, el tributo a la piedra”. Y como en Azul la recaudación de recursos propios era injusta y regresiva, se buscó dar un paso hacia la equidad, ya que, como explicó Laurini, no tenía “nada que ver con la capacidad contributiva de los distintos sectores de contribuyentes”, era “absolutamente desproporcionado”.

La presidenta del Concejo Deliberante aclaró que para garantizar la prestación de los servicios esenciales fue que, en general, se plantearon incrementos escalonados para la mayoría de los tributos. Por eso también existió un incremento escalonado, inferior a la inflación, para la tasa de seguridad e higiene. Para la primera liquidación (trimestre abril a junio), el incremento será del 20 % respecto de la última cuota del año anterior. Para el segundo trimestre (julio a septiembre) el incremento será del 25 % y para el último trimestre del año (octubre a diciembre), el incremento será del 25 %.

También la tasa vial-rural que genera los recursos que va a administrar el ente descentralizado se acordó con las instituciones que componen la Comisión Vial Rural (COVIR), un incremento general del 180 %. Se modificó la base imponible para corregir la distorsión que provocó durante muchos años el método de cálculo anterior sobre la valuación fiscal de los inmuebles. Así, se vuelve a utilizar la tradicional segmentación por cuarteles vinculada a la capacidad productiva y la rentabilidad de las parcelas por las que se tributa.

“Con respecto al derecho por explotación de canteras, logramos modificarlo el año pasado y hacer un planteo prácticamente igual al que hace Olavarría”, expresó Inés Laurini. “Acá se cobraba por tonelada de material extraído y el precio se fijaba en octubre-noviembre de un año y era el precio que iban a pagar durante todo el año siguiente”, explicó. La modificación fue calcar “la misma propuesta tributaria de Olavarría, que es el 3 % del producto del valor en el mercado, al mes anterior a la liquidación”. En El Cohete dimos cuenta de esa injusticia tributaria que existía en Azul.

Con respecto al tributo sobre explotación de canteras, Laurini sostuvo: “Azul es el segundo distrito minero de la provincia de Buenos Aires, bastante lejos de Olavarría, que tiene cemento, y nosotros somos uno de los más importantes proveedores de granito triturado que se usa en la obra pública; uno de los problemas es el control. Ahora, teniendo la gestión, con la asunción de Nelson Sombra como intendente, esperamos que eso mejore, aunque el momento no será propicio porque de acuerdo a los anuncios del Presidente electo, existirá disminución de la obra pública, ya estamos viendo los despidos”.

Otro de los problemas “es la falta de energía en la zona del distrito donde están las canteras donde algunas no tienen acceso a la energía eléctrica y por eso no existe un desarrollo importante de la actividad —se podría tener un desarrollo más importante—, pero que se encarece porque tienen que triturar con máquinas que funcionan a nafta”, según precisó Laurini. “Nosotros tenemos un recurso, que mejoramos, pero no es un recurso sustancial. También tenemos un parque eólico como YPF Luz, que está exento de pagar tributos, y tenemos más de 550.000 hectáreas productivas. Tenemos todo lo que necesita el mundo, pero Azul está estancada y es un distrito donde hay muchísimo contraste, por eso, de alguna manera estamos planteando la equidad en la progresividad tributaria”, afirmó.

En las elecciones del 22 de octubre en Azul, Nelson Sombra, candidato por Unión por la Patria, fue elegido intendente, superando por casi mil votos a la candidata de Juntos por el Cambio, Natalia Colomé, y obtuvo una mayor diferencia con Luis Kletnicki, de La Libertad Avanza. Ese escenario divido en tres le permitió a Sombra imponerse. Su idea como intendente es generar una transformación política, que no tiene como centralidad los acuerdos políticos con las demás fuerzas, que existirán en la clara convivencia democrática, sino tener a toda la ciudadanía azuleña como principal aliada, y para conquistarla debe demostrar haciendo lo que la sociedad espera: que Azul progrese. Tener mayor autonomía económica que beneficie a la población es primordial.

 

Nelson Sombra recibiendo en la Cámara de Diputados el diploma de intendente electo de Azul.

 

Ante la malicia de medios comerciales que se encargaron de hablar del tema ocultando la verdad de los hechos, Nelson Sombra explicó: “La tasa urbana, que son treinta mil frentistas, siempre ha pagado por servicios generales. No inventamos una tasa nueva, solamente cambiamos el nombre, ahora es servicios esenciales, y lo que hicimos es sumar al inmueble rural”. Y agregó: “Dentro de los servicios esenciales, está el transporte. (…) Tenemos un distrito que tiene dos localidades aledañas, a 60 kilómetros cada una de la ciudad cabecera de Azul, que son Chillar y Cacharí, y no tienen transporte interurbano. De eso estamos hablando”, remarcó, acentuando la desigualdad en el distrito que piensa como intendente corregir.

Los centros de salud “son tan pequeños que solamente puede atender un profesional o tenés que vacunar en un pasillo, entonces tiene que ver con eso, con ampliar la infraestructura de los centros de salud”. Ese es el motivo, para Sombra, por el que están sumando más contribuyentes a esa tasa. Lo mismo se hizo con la tasa de seguridad e higiene, y se elevó el monto, indicó Nelson Sombra. “Es un acto de justicia tributaria, de justicia social, claramente, el incorporar a los inmuebles rurales al sostén de los servicios esenciales de todo el distrito”, expresó.

Nelson Sombra estimó: “Por esa tasa se van a recaudar mil cuatrocientos millones, que por el índice de cobrabilidad existente esperamos superarlos. Pero en lo que respecta al presupuesto — aprobado el martes—, que es de veintiséis mil millones de pesos, lo que se recauda por esa tasa sería menos del 5 % del presupuesto total. Pero esa recaudación va a garantizar tener servicios que en Azul hace rato no se prestan”. Y agregó: “Es cierto que Azul está estancada desde hace mucho tiempo. Nosotros en la campaña hemos planteado la idea de un gobierno que nos permita ordenar, integrar, desarrollar y embellecer Azul. Una de las primeras medidas que queremos abordar es la accesibilidad y tiene que ver con implementar un servicio interurbano de transporte”.

Otra de las medidas a implementar es la accesibilidad a la salud. “Azul cuenta con 13 Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS) que no tienen la infraestructura necesaria para las distintas prestaciones que se podrían brindar en los distintos barrios. Esta tasa de servicios esenciales viene a reparar ese déficit en materia de infraestructura porque necesitamos ampliar cada uno de los CAPS para que se puedan atender en el mismo lugar que la ciudadanía reside”, remarcó Sombra.

El intendente es consciente de lo que se viene a nivel nacional, porque Milei no ha ocultado sus intenciones de recortes y paralización expresando que se vendrá una estanflación. “Se vienen momentos donde los distritos se deben fortalecer en todas sus capacidades, ser creativos a la hora de potenciar su propio desarrollo y posibilidades, pero dependerá de la posibilidad de que los distritos chicos o medianos tengan de poder hacer obra pública de magnitud”, y ejemplificó: “Nosotros necesitamos un puente que conecte distintas arterias de las localidades, una obra de bajo nivel en otro sector de la ciudad, que claramente esas obras son difíciles de llevar adelante solamente con recursos locales. Trataremos de potenciar el desarrollo interno, queremos generar un perfil identitario que nos pueda contener y que de alguna manera nos prepare para todas estas vicisitudes que van a suceder a nivel nacional y que también nos permita para ser un distrito con cierta autonomía y poder defendernos”.

El ascenso progresivo de la tasa de servicios esenciales dotará a la nueva gestión de mayores ingresos para paliar las desigualdades existentes. El municipio de Azul planteó el presupuesto 2024, donde la recaudación por recursos propios llega al 40 %. Un 59 % de los recursos es a través del aporte provincial y el 1 % es nacional. En tiempos de Milei y sus manos de tijera, dar pasos en reformas tributarias que permitan garantizar una mayor autonomía económica municipal es una forma de supervivencia.

 

 

 

 

--------------------------------

Para suscribirte con $ 1000/mes al Cohete hace click aquí

Para suscribirte con $ 2500/mes al Cohete hace click aquí

Para suscribirte con $ 5000/mes al Cohete hace click aquí