Para apagar la motosierra

A qué nos enfrentamos y cómo salir adelante

 

 

A qué nos enfrentamos

Estamos frente a una sociedad que mayoritariamente eligió las propuestas basadas en explícitos discursos de odio frente a todas las alternativas de construcción democrática.

Lo demuestran algunos de los discursos en vivo y en directo en que Javier Milei basó su campaña, que se complementaron con la violenta imagen de la motosierra en mano.

 

  • “La casta que empobrece a los argentinos se compone de los políticos ladrones, son los kirchneristas, los empresarios prebendarios, los sindicalistas”.

 

  • “El Estado es una organización criminal violenta que vive de una fuente coactiva de ingresos llamada impuestos y, por lo tanto, los impuestos son un robo y cualquier iniciativa que conste en bajar impuestos yo voy a estar de acuerdo”.

 

  • “Entre la mafia y el Estado, prefiero a la mafia. La mafia tiene códigos. La mafia cumple. La mafia no miente. La mafia compite”.

 

  • “Amo ser el Topo adentro del Estado; soy el que destruye el Estado desde adentro, es como estar infiltrado en las líneas enemigas…”.

 

  • “El Estado es el pedófilo en el jardín de infantes con los nenes encadenados y bañados en vaselina”.

 

  • “Una empresa que contamina el río… ¿Dónde está el daño? Lo que no está bien definido ahí es el derecho de propiedad. Esa empresa puede contaminar el río todo lo que quiera”.
@econews.es

📍Javier Milei & polémica: “Una empresa puede contaminar un río todo lo que quiera.” 👉🏼 El candidato a presidente por Libertad Avanza se refirió al lugar que tienen los recursos naturales en el sistema productivo de un país. 🎙️ En una conferencia en La Rural, sostuvo que el valor de los recursos naturales debería darse bajo las reglas de mercado. 📌 Dijo que una empresa puede “contaminar el agua” cuando “sobra” porque su precio sería cero. Pero, en caso de escasez alguien se ocuparía de “apropiarse” de ese río y se terminaría la contaminación. ¿Qué pensás de lo que dijo? 🧐 #YoVotoAmbiente #CambioClimático #Contaminación

♬ sonido original - EcoNews en Español

 

  • “La venta de órganos es un mercado más. ¿Por qué no puedo disponer de mi cuerpo? Que el Estado me esclavice, pero si yo quiero disponer de cualquier parte de mi cuerpo, ¿cuál es el problema?”

 

Falta salir del asombro que produce la efectividad de esos discursos, toda vez que pasados nueve meses de su gobierno, Milei todavía conserva un elevado nivel de aceptación social; Synópsis, al 23 de agosto, estima un nivel de aceptación del gobierno del 42,1% y un nivel de rechazo del 49,6%; a su vez, Atlas Intel, a 100 días del gobierno, estimaba un nivel de aceptación del 43,5% y un nivel de rechazo del 45,1% a pesar del violento aumento del desempleo, de la pobreza, de la indigencia y de la aparición del hambre en nuestro país, producto de la caída de las jubilaciones y de la actividad económica, en especial de la industrial, de la reducción de la inversión en educación y ciencia y tecnología, así como del desgüace de los derechos humanos, de los de género y de las minorías.

Para ilustrar el estado de la pobreza en nuestra sociedad alcanza con los datos del INDEC sobre el nivel de empleo, que muestran que entre el último trimestre de 2023 y el primero de 2024, la desocupación abierta, excluyente de la subocupación, aumentó desde el 5,7% hasta el 7,7%, afectando a más de 1,7 millones de personas; asimismo según la UCA, en el mismo período la pobreza y la indigencia aumentaron al 55,5% y al 17,5% de la población, respectivamente. La inseguridad alimentaria total para áreas urbanas, relevadas por la encuesta del ODSA-UCA, alcanza al 24,7% de las personas, al 20,8% de los hogares y al 32,2% de los niños, niñas y adolescentes.

Necesitamos poder interpretar por qué y cómo viene sucediendo esta aparente falta de reacción social.

Creo que en el presente y a nivel mundial existen dos fenómenos concurrentes que explican el resurgimiento de las derechas: el primero es el predominio de las pasiones tristes, las cuales según postula Françios Dubet, en este mundo desigual llevan a la frustración y al resentimiento desalentando la lucha por una sociedad mejor; el segundo fenómeno es que quienes han perdido las esperanzas de un mejor futuro pasaron de construir sus discursos a partir de los propios ideales a la adopción de discursos construidos por terceros. En nuestro país estos fenómenos se vieron reforzados por el incumplimiento de nuestras promesas de la campaña electoral de 2019 por parte del gobierno de Alberto Fernández.

En nuestro país y en el mundo se vive un resurgimiento de las pasiones tristes. El odio, la ira, la envidia y el resentimiento circulan sin aparente resistencia mediante discursos basados en esos sentimientos en modo simultáneo con las fake news y el ocultamiento de realidades que los poderes fácticos no quieren mostrar; esta circulación ocurre tanto por las redes sociales como por medios radiales y televisivos, incluyendo informativos y programas de opinión.

Esas pasiones generan reacciones ante lo que se siente injusto, pero por influencia de los discursos imperantes, antes que direccionar las reacciones contra quienes originaron esas injusticias, van contra los más pobres y los desempleados, caracterizados como inútiles o vagos; contra los políticos, señalados como corruptos y en términos más vagos, contra “la casta” a quien se adjudican todos los males.

Los discursos construidos por terceros, y en particular el negacionismo, siempre existieron, pero su incidencia se vio reforzada por los efectos de la pandemia y del mal manejo de esta por el gobierno de Alberto Fernández, en particular por episodios como la fiesta de Olivos y por la insuficiencia de asistencia económica a los actores de la economía informal que no fueron debidamente identificados y quedaron fuera del alcance de las medidas oficiales, lo que generó en ellos un profundo resentimiento hacia los “planeros”.

Mientras la admiración, el amor, el deseo y la alegría nos alientan a alcanzar lo mejor para nosotros y para los demás, tal como lo plantea la consigna “la Patria es el otro”, las pasiones tristes en combinación con las fake news, los negacionismos y los discursos de odio generaron entre muchos de los desesperanzados de los sectores más desprotegidos el deseo de que a los demás les vaya tan mal como a ellos mismos.

Entiendo que esos fueron los principales motivos por los cuales una parte importante de los sectores más desprotegidos y sin esperanzas por su futuro se unieron a los sectores minoritarios que desde siempre actuaron en contra de los intereses populares, pero que hasta ahora nunca habían podido llegar al ejercicio del poder por vía democrática mostrando una motosierra o haciendo explícitas sus reales intenciones.

Los discursos del odio, las difamaciones que ahora llamamos fake news, siempre han existido, pero en la actualidad, cuando la violencia directa por ahora no parece permisible o no resulta efectiva, como hace dos años fue el caso del intento de magnicidio de Cristina Fernández de Kirchner, esos mecanismos se han convertido en la principal y más eficaz herramienta de los poderes económicos concentrados.

Para mostrar que los discursos del odio siempre existieron basta recordar que al inicio del siglo XX las minorías oligárquicas impulsaron y respaldaron los sucesos de la Semana Trágica, las masacres de la Patagonia Rebelde y que, más adelante, con el aporte de parte de los sectores medios, se convirtieron en el anti-peronismo, impulsando y respaldando los bombardeos a la Plaza de Mayo, los fusilamientos en los basurales de León Suárez, el plan CONINTES, antecedente de la represión sistemática de la dictadura cívico militar y de los 30.000 desaparecidos.

Aunque duela decirlo, ante la falta de esperanzas en un futuro mejor, parte importante de los sectores populares se unieron a esas minorías y habilitaron su triunfo electoral.

 

 

Cómo salir adelante

Ante todo, creo necesario decir que desde hace casi 70 años el peronismo sobrevivió a toda esa violencia y a todos los intentos por destruirlo desde afuera o de domesticarlo desde adentro y que este presente, por doloroso que nos resulte, no será una excepción y que podremos y tenemos que salir adelante.

Entiendo que lo primero es salir de la actual parálisis, comenzando por analizar con mayor profundidad de la que tienen estas líneas las razones del apoyo de una porción sustantiva de los sectores populares que, sin nada que perder, volcaron su voto al proyecto anarco liberal, así como definir mediante prueba y error las mejores formas de recuperar los votos perdidos.

Lo segundo es militar desde abajo hacia arriba, puerta a puerta y cara a cara demostrando qué está haciendo Milei en la realidad efectiva: empobreciendo a los más necesitados para enriquecer a los más poderosos; demostrar que “la casta” que viene ajustando Milei no eran los políticos ladrones, los kirchneristas, los empresarios prebendarios ni los sindicalistas, sino que son los desempleados, los jubilados y los empobrecidos por sus medidas de ajuste económico; también que ese ajuste económico y social es una crueldad inútil que no conducirá a un futuro mejor para los sectores populares. Tenemos que evitar que esos sectores sigan agregando combustible a la motosierra de Milei.

También necesitamos comenzar a elaborar y consensuar nuestras propias propuestas para un próximo gobierno, las que tienen que volver a enamorar a las grandes mayorías; para ello creo imprescindible poner la centralidad en un decidido impulso a la producción, al trabajo y a la soberanía; creo que esas propuestas serán la base para confrontar en modo efectivo con las propuestas neoliberales de LLA y del PRO en las elecciones de medio término. Un ejemplo de esas propuestas son los fundamentos para una política industrial, nacional y federal, recientemente publicados en El Cohete a la Luna, bajo el título “Trabajo, Producción y Soberanía”.

El peronismo no puede permanecer como una mera fuerza reformista y debe recuperar toda su potencia transformadora mediante el ejercicio de la justicia social, la independencia económica y la soberanía política.

Lo antes que sea posible necesitamos elegir democráticamente a la conducción del peronismo y a los candidatos que propondremos para salir de la catástrofe que estamos viviendo. Esa definición facilitará las demás tareas antes mencionadas.

En modo permanente nos queda mantener la vigencia del ejercicio de la memoria, la búsqueda colectiva de la verdad y las exigencias de justicia para todas y para todos.

No podemos perder más tiempo en lamentaciones. Tenemos que poner manos a la obra de inmediato.

 

 

 

--------------------------------

Para suscribirte con $ 1000/mes al Cohete hace click aquí

Para suscribirte con $ 2500/mes al Cohete hace click aquí

Para suscribirte con $ 5000/mes al Cohete hace click aquí