El gobierno de Río Negro presentó oficialmente el plan maestro para una reforma integral de la gestión de los recursos hídricos bajo jurisdicción provincial que elaboró Mekorot Israel National Water Co., empresa con denuncias y sanciones internacionales por violaciones a los derechos humanos en Palestina. De todos modos, el texto definitivo de la propuesta técnica todavía no está finalizado. Tampoco se informó sobre la eventual continuidad de la relación contractual del Estado rionegrino con la firma israelí.
El secreto de los actos públicos ha marcado este proyecto desde sus orígenes en 2022. En ese año, funcionarixs del gobierno nacional y un grupo de gobernadores viajaron a Israel para recorrer las instalaciones y obras de infraestructura de esta empresa. El Consejo Federal de Inversiones (CFI) firmó un acuerdo con Mekorot cuyos términos permanecen secretos. En octubre de ese mismo año, el CFI firmó acuerdos con el primer grupo de provincias, entre las que se encuentra Río Negro. El acuerdo particular entre la ex gobernadora Arabela Carreras e Ignacio Lamothe, secretario general CFI, se conoció con posterioridad, fruto del reclamo legisladorxs de la oposición y organizaciones ambientalistas.
Pese a lo que dijo Alberto Weretilneck, gobernador rionegrino, el miércoles 10 de diciembre en Casa de Gobierno (Viedma), el secreto y la discrecionalidad persisten en el manejo político del tema. Tan es así, que su propia gente en la Legislatura fue involucrada de apuro y sin consulta previa en la movida de la presentación formal de un proyecto cuya letra chica conocen unos pocos. Andrea Confini, integrante del directorio de YPF por la provincia y esposa del gobernador, pidió a Gastón Renda, presidente del Departamento Provincial de Aguas (DPA), que se ocupe de la logística para hacer una presentación del plan maestro hídrico en la Legislatura, según una fuente extraoficial de la capital provincial. Carlos Valeri, del bloque oficialista, convocó informalmente a los miembros de la comisión de Planificación, Asuntos Económicos y Turismo, para la presentación, que se extendió por unas cuatro horas. Un grupo de organizaciones sociales primero solicitó acceder a esa exposición, lo que les fue negado; después, reclamaron copia taquigráfica de la reunión, la que hasta el viernes 12 no había sido entregada.
El manejo político de concentración y retaceo de la información pública desvía, lamentablemente, del debate sobre el contenido técnico de la propuesta. Se desaprovecha una oportunidad de analizar los alcances materiales en la población local y su forma de vida del calentamiento global vinculado a los efectos del uso de gases de efecto invernadero por los capitales industriales. El retaceo es parte del modelo de gestión en estas democracias restringidas y, a la vez, un intento de evitar dar cuenta sobre la elección y aceptación de Mekorot, instrumento estratégico en el sofocamiento del pueblo palestino. Legisladores del oficialismo llegaron a pedirle perdón a los directivos de la empresa israelí porque Magdalena Odarda, del bloque Vamos con Todos, citó informes de Naciones Unidas que califican el manejo del agua como arma contra Palestina.
Los informes en Casa de Gobierno y ante la Comisión de Planificación los brindaron Diego Berger, argentino radicado en Israel, coordinador de proyectos internacionales de la empresa, y Juan Andrés Pina, director de proyectos. Se movilizaron a la Legislatura sin poder ingresar la Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Viedma y Carmen de Patagones, la Multisectorial Comarca Marítima, Multisectorial Golfo San Matías, la Red de Comunidades Costeras, la Campaña Fuera Mekorot y la Coordinadora de Jubiladxs de Río Negro, entre otros espacios.
PowerPoint
El proyecto del contrato prevé análisis y proyecciones hacia el 2050. La magnitud del estudio no se condice con la escasa documentación disponible: el PowerPoint de la presentación que facilitó Odarda. El plan maestro se asienta sobre siete ejes: análisis de la situación actual de los recursos hídricos; proyecciones de la oferta y la demanda (2030/2040/2050); evaluación de la autoridad de regulación de los servicios de agua potable y saneamiento; abastecimiento de la zona atlántica y región sur; reutilización de efluentes de plantas de tratamiento de líquidos cloacales; evaluación integral para la modernización del canal Ingeniero Suárez, y cálculo del valor económico del agua.
Los ríos Negro y Colorado son los grandes aportantes del agua dulce en esta provincia. El primero se forma con los ríos Limay y Neuquén, que nacen con aguas de la cordillera de los Andes, lo mismo que el Colorado. La cuenca de los ríos Limay, Neuquén y Negro se comparte jurisdiccionalmente con Neuquén. El del Colorado, de menor caudal, entre cinco provincias (Mendoza, Neuquén, La Pampa, Río Negro y Buenos Aires).
Las aguas del Río Negro cubren el 90% de la demanda actual de todos los usos; el Colorado, el 7,9, y el Azul, el 1,2. La totalidad de la demanda se corresponde en un 97% a la actividad agrícola, el 2% al consumo humano y el 1% a las actividades industriales. El uso de la industria de los hidrocarburos no está incluido en ese 1% porque utilizan perforaciones propias.
Los caudales ya registran disminuciones, según la documentación volcada en el informe dos de octubre del año pasado sobre proyecciones de la oferta, de la demanda y balance hídrico. En una década, el caudal del río Neuquén disminuyó en 53% y en un 36% el Limay. La disminución de los dos afluentes del Negro representa en las mediciones de la estación Allen un 42% menos. La proyección para el 2030 es del 11,8% menos de caudal del Negro y 11,5% menos para el Colorado.
La vida del río Negro define gran parte del destino de todo el territorio. La provincia tiene 203.013 kilómetros cuadrados, de los cuales 116.000 son drenados por la cuenca del río, que tiene 635 kilómetros de extensión desde su nacimiento a la desembocadura en el océano Atlántico.
A fuerza de pedidos formales se conocieron solamente los primeros dos informes. De los cinco ejes restantes, sus títulos sugieren algunas posibilidades de la propuesta de la empresa. El fortalecimiento del viejo canal Pomona-San Antonio inaugurado en 1972 (que lleva el nombre del ingeniero Suárez) se complementará con obras en San Antonio Oeste, Sierra Grande y Playas Doradas. Todo indica infraestructura para el nuevo puerto en Punta Colorada y la exportación de GNL por la costa atlántica rionegrina, así como a la mano del desarrollo del yacimiento de uranio y Calcatreu un poco más al sur.
En cuanto al desarrollo productivo, hacia el 2055 plantea la incorporación de 179.000 hectáreas bajo riego para la agricultura, con inversión pública y privada que merece un análisis más detallado con otras fuentes diferentes al informe Mekorot.
En principio, ninguna fuente habla de una reforma al código de aguas vigentes, aunque podría desprenderse del señalamiento a supuestas incompatibilidades en las funciones del DPA. Resta conocer el texto de evaluación y propuesta de una autoridad de regulación de servicios de agua potable y saneamiento, así como también del análisis de costo y valor económico del agua. Ambos pueden empujar a una reforma legal, como Mekorot deja entrever en cada provincia en la que trabaja.
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