Pullaro y Llaryora emulan a Bukele.

El experimento libertario pone a prueba nuestros límites y convierte nuestras ciudades en sitios donde no se puede vivir.

A Israel no le alcanza con Gaza, ahora apunta a Cisjordania. La Knéset declaró que es “parte inseparable” de Israel el territorio palestino ocupado desde 1967.

El problema no es Netanyahu, sino el proyecto nacional sionista para Israel, que en estos días adopta su forma más inhumana en la Franja de Gaza.

Ocupación, limpieza étnica, crímenes de guerra y genocidio en Gaza.

Algunos gobiernos occidentales ya se manifiestan en contra del avance israelí, pero la estrategia de la crueldad no cede.

Cómo Israel, con la ayuda de Estados Unidos, destruyó no sólo Gaza, sino también los cimientos del derecho humanitario.

Hambruna y desnutrición generalizadas en todo el enclave devastado por la guerra, incluso entre los niños.

Organizaciones israelíes de derechos humanos describen el ataque a Gaza como genocidio por primera vez.

El senador estadounidense Angus King, partidario de larga data de la ayuda militar a Israel, admite que Netanyahu es indefendible.